El contacto de los hombres de la Tierra con inteligencias superiores, habitantes de otros planetas, es uno de los grandes misterios que aun siendo una experiencia extraordinaria, deja de ser novedoso pues históricamente tiene miles de años documentándose. Lo mismo ocurre con quienes durante años hemos mantenido ese contacto, y aun reconociendo que es un evento asombroso pasa a ser cotidiano y también evidenciado.
Quienes nos han asistido en calidad de maestros… ¿nombres? muchos, muchísimos, los comandantes Bolastor, Golark figura galáctica, Comisionado espacial de la 5ta dimensión de Andrómeda. Ahmed,Hagalaz, Natsun, Leocofold, civiles siderales, Hagalaz, Pertz, Aol, Ashtair amén de muchos otros por lo que nos es imposibles de citar aquí. ¿Procedencias? Diversas, tanto de planetas conocidos como de otros de remotos lugares del universo e incluso intraterrenas. Tanto a mí como al extraordinario grupo que me acompaña nos han permitido crecer, evolucionar y comprender que no tan solo es real como experiencia que vivimos, pues la coherencia prima las comunicaciones, seguidas de una sostenida enseñanza.
Desde siempre ―en los inicios del contacto― nos dieron conocimiento, entonces muy sencilla pero siempre sorprendente. Pasados tantos años ―en tiempo terrestre―, hemos merecido recibir un enseñanza de altísimo nivel científico, con el propósito de ser entregado a laboratorios en la Tierra. El mundo especializado ha trabajado mucho a nivel de lo tangible más no lo intangible, han comenzado con lo físico, ha llegado el tiempo de conectar entre esa fase y la energética que algunos científicos en su mundo ya conocen.
Se nos guio para que este conocimiento fuera divulgado en forma sencilla, como lo he hecho en diversos congresos y/o foros. Allí el tiempo suele ser breve, los interesados muchos, pero por otras vías me permito ahora ser más explícita sobre este contundente tema. Con esos conocimientos se conformo el pensum de CEINPLA, que sigue su dinamismo aumentando día tras día.